En Estados Unidos y algunas partes de Europa - las más propensas a lo peor del gusto e,
irónicamente, las más propensas a carecer de grandes transformaciones históricas -
se juega a ser un soldado de guerras de antaño. Muchos entusiastas hacen su mejor esfuerzo
para dramatizar ("reenact", el término original, no tiene una traducción exacta al español)
ya sean eventos específicos - y muy tontos, como una batalla de la Guerra Franco-Americana -
o casi guerras enteras.
Los gringos, propensos a categorizarlo todo, definen el éxito de una dramatización de acuerdo a su
apego con la realidad. No solo si los muertos en guerra fallecen con la necesaria severidad y dolor,
sino también si sus disfraces son los adecuados o el tipo de trinchete que se han inventado está en
línea con los usados en la época deseada.
Quienes fracasan en los esfuerzos anteriores tienen un nombre: "farbs". Se les conoce también como "soldados de poliéster".